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Te darás cuenta de que Iby es diferente con tan sólo mirar sus ojos.  Resulta imposible escapar de aquellos atrayentes orbes color magenta brilloso que, además de dotarla con cierto toque exótico, también resulta mortal.
Su atractivo va más allá de un rostro angelical y unos ojos coquetos, puesto que toda la construcción de su cuerpo despierta interés. Con una tersa piel y poseyendo un metro con sesenta y dos centímetros (1.62)  de altura, la figura esbelta de Ibuki parece imponente por donde sea que se le mire, pues no es necesario que aparezca luciendo como una gótica o como una punketa para que se deduzca que hay que tener cuidado con ella.
Empezando por su rostro, éste no tiene las delicadas facciones de una princesa aunque eso no significa que se vea masculina, sino ruda. Posee un cutis muy bien cuidado, sin ninguna imperfección de acné ni marcas de nacimiento, sus orbes  están acompañados de largas pestañas que enfatizan su mirada. Tiene pómulos finos, una nariz respingada de un tamaño mediano y una boca perfectamente definida, cuya carnosidad es más evidente en el labio inferior.
Su cabello es una genialidad. Éste es negro azabache, lacio y bastante sedoso, lo lleva corto por diferentes partes  mientras que conforme avanza sobre sus hombros se observan mechones más largos e indefinidos, igualmente hay un muy rebelde flequillo que cae en corte rebelde por su frente, y  por último, en la mayoría de su cabello de observan “rayos” teñidos de un azul, magenta y blanco platinado.

Su cuerpo es ideal para su complexión, pues Iby al ser menuda tiene las medidas correspondientes como por ejemplo, un busto de tamaño promedio aunque no por eso desapercibido, una estrecha cintura y unas amplias caderas. Sus brazos y piernas están muy bien torneados así como un abdomen totalmente plano, señal de que realmente trabaja su cuerpo. Su vestuario es digno de una chica rockera pues su gama de colores se basa en el negro, magenta, rojo y demás colores oscuros. En la parte superior de su figura generalmente lleva puesta una blusa de colegia con su toque de "desarreglado", donde comienzan -por lo general- faldas tableadas de colores oscuros acompañadas de medias rasgadas de diferentes colores como magenta y azul turquesa. Finalmente, su calzado se trata de botas o tenis converse

Si hay algo que pueda definir a Ibuki eso quizás sea su fortaleza, no la física, sino la que la mantiene en una sola pieza a pesar de las circunstancias. Ella no deja que las personas puedan ver sus debilidades, prefiere guardárselas para sí misma, porque la vida la ha obligado a aparentar ser una mujer integra que puede causar imponencia con tan sólo aparecer dentro de una habitación. Sin embargo, eso no significa que sea una chica dura o alguien con quien es difícil llevarse, si bien tal vez sea severa con determinadas personas –como quienes le desagradan, por ejemplo– ella en realidad es una chica bastante amigable, claro, una vez que sabes de qué forma llevarte con su persona.  Digamos que para Iby (como le gusta que la llamen), el respeto mutuo es algo primordial: si tú la tratas bien, ella te tratará mucho mejor, pero si intentas bullearla ella será mucho peor. Es realmente simple, la pelinegra no se deja pisotear. Siendo sinceros, la mujer no sería buena compañía estando molesta, pues cuando lo hace es realmente en serio. Tiene un espíritu vivaz que le permite sonreír aún en las adversidades y seguir dando lo mejor de sí, es como si se negara a rendirse o a pensar cosas pesimistas, pues considera que no llegará a ningún lado con eso. Su manera de hablar puede considerarse un poco alocada debido a que tiende a ser directa, a decir lo que piensa y a no avergonzarse por decir groserías. Precisamente, para Iby decir una grosería no es más que un recurso didáctico para poder expresar satisfactoriamente la forma en la que se siente, incluso si llegarse a hablar mal frente a alguien, éste no tendría por qué tomárselo personal.

¿Entonces ella es violenta? No, más bien rencorosa  y un tanto vengativa aunque en contadas ocasiones, vale dejar claro que sólo y únicamente si dicho sujeto ha hecho algo verdaderamente atroz. Si afecta la vida de Iby  ella no va a dudar en hacer justicia con mano propia. Es segura de sí misma y en rara vez se avergüenza, de hecho, las ocasiones en las que sus mejillas se han puesto rojas debido a la pena es cuando un chico o chica o chica está haciendo algo realmente bien para ganársela o cuando de verdad pasó un evento demasiado embarazoso. Fuera de eso siempre se le verá una sonrisa confiada en el rostro, a veces algo cínica y una pose que parece indicar que está lista para todo. La mayor parte del tiempo se muestra relajada, pero si la situación se torna tensa su comportamiento se mostrará más serio y mucho más maduro. Si la situación lo requiere no actuará como una nenita a la que le da miedo romperse la uña o el tacón de su calzado, eso sería lo de menos si se trata de proteger a alguien.

Un dato importante a aclarar es que es una mujer muy seductora y promiscua ya que tiene parte del alma de un súcubo y no dudará en enredarte en sus redes para satisfacer sus placeres carnales. Sabe cómo hablarle a las personas para ganarse su confianza y guiarlos a la cama, pero ¿Ella les hace daño? No, en realidad sólo busca aplacarse la calentura que día con día la atormenta.

«¿Por qué he de yacer debajo de ti? Yo también fui hecha con polvo y por tanto, soy tu igual.»
Se dice que la existencia de Ibuki es tan curiosa como ella misma. Se desconoce en realidad si tuvo un nacimiento “normal” pues se dice el rumor de que ella es la reencarnación de Lilith, o al menos es una parte de aquel demonio.

Lilith es el demonio rebelde, el mal ejemplo que precedió a Eva, más obediente a lo que Adán esperaba de una mujer. Tras abandonar el paraíso, Lilith se asentó en la costa del Mar Rojo. Esta región se caracterizaba, según la tradición mitológica, por la presencia de innumerables demonios, con los cuales engendró nuevas criaturas, «a razón de más de cien por día» proliferando la zona. Aquello quizás fue la razón por la que en un tiempo el mundo se llenara de entes malignos. Ante este hecho, Dios envió a un grupo de ángeles para exigirla que volviera con Adán: «Regresa con Adán de inmediato o te ahogaremos». A lo que ella respondió que ya no podía regresar porque «Dios me ha exiliado por verme como igual ante Adán, no hay forma en que pueda volver». Finalmente, Dios permitió vivir a Lilith, pero la castigó haciendo que diez de sus hijos demoniacos perecieran cada día y, cuando el último de sus hijos pereciera, la existencia de Lilith se consumaría hasta desaparecer por completo.

Lilith aceptó aquel acuerdo. Vivió por cientos de años sin preocupación, pues tenía un enésimo número de hijos demoniacos. Y cuando quedaban sólo cien de ellos fue cuando decidió buscar algo para prolongar su existencia; estúpido por su parte el haber dejado pasar tanto tiempo. «Si engendro más hijos, no moriré» Fue lo que pensó, e inútilmente intentó reproducirse nuevamente, algo había pasado que ya no tenía la capacidad de engendrar más demonios. Asustada con la sombra de la muerte y la ira de Dios sobre ella, intentó por todos los medios que le quedaban alguna forma de sobrevivir. Llegó hasta Japón por las historias de un nigromante famoso que podría ayudarle. «Puedo traspasar tu alma por medio del vudú, pero ya no serás la misma Lilith». Fueron las palabras de aquel sujeto; Lilith desesperada por intentar sobrevivir aceptó los términos.  

El nigromante secuestró a una niña, pues la virginidad era la clave para consumar el hechizo. Secuestró a Ibuki Mioda, la hija de una familia acaudalada y muy importante en la zona. No es de extrañarse que la pequeña sufriera una violación con objetos fálicos hasta desfallecer, pues según afirmaba éste nigromante, era la clave para poder traspasar el alma de Lilith al cuerpo de Ibuki. Pasó toda la noche logrando aquella unión hasta amanecer. El cuerpo de Lilith, que también había sido violado con los objetos aquellos, “murió”. «El alma de Lilith yace en éstos objetos ahora» Según el nigromante el cuerpo no era más que un mero contenedor. Volvieron a ser introducidos en el cuerpo de Ibuki y por medio de unos hechizos el alma de aquel demonio se fusionó con el de la niña.
Para cuando Ibuki despertó, se sentía diferente. Era como si el pensamiento de ambas se fusionara. Siguió con su vida normal en casa aparentando que todo iba bien en su vida, creció hasta volverse una adolescente y fue en ése momento cuando todo se jodió. La verdadera esencia de Lilith salió a flote. Se volvió la demonio promiscua que fue en un inicio; sanguinaria y lujuriosa. Sus padres que estaban aterrados por la actitud de aquella hija rebelde, pensaron que se trataba de una etapa y necesitaba de una educación correctiva. Fue mandada a Australia, a una academia llamada Greenlight donde la educación y la disciplina se decían era envidiable y perfecta.

•-Siendo la reencarnación de Lilith, es una persona bastante lujuriosa y sexualmente activa.
•- No posee alas para volar, pero puede dar largas zancadas y brincos altos para escapar si la situación lo amerita.
•-Es bastante ágil y flexible a la hora de moverse; además posee un perfecto equilibrio capaz de mantenerse firme en lugares de espacios reducidos o grandes alturas.

">•- Gustos:
La lluvia. || La música rock. || Las faldas. || Lencería provocativa. || Los piercings. ||  Las películas de terror. || La ropa rocker.  || El esmalte negro. || La música ruidosa || ||  Cantar. || Los peluches, aunque no es algo que dice en público. ||  Andar en motocicleta. ||  El alcohol. || Vestir bien || Las cerezas, las ama. || Los videojuegos. || Sentirse querida.

•- Disgustos:
Las personas muy superficiales. || Hipocresía. || Que la manden a callar. || Ser ignorada. || Sentirse humillada. || Limitarse. || La discriminación, de cualquier tipo. || Vestirse "como una dama". || Llorar. || Que invadan su espacio personal. || Recibir órdenes. || Días muy calurosos. ||  Ser subestimada. ||  La gente prepotente. || Los sermones. || Las mentiras y la traición.

•- Tiene 8 perforaciones de picos en cada oreja, 3 mas del lado izquierdo del labio, uno en la lengua, uno en el ombligo y uno en la nuca.
•- Sabe tocar la guitarra.
•- Le gusta llevar en la cabeza una diadema que tiene dos "protuberancias" parecidas a unos cuernos que tienen cabello de su hermano, los conserva como recuerdo.
•- Su medio de transporte es una motocicleta negra con franjas color magenta adornada con algunas estampas de estrellas.
•-Suele darse baños de leche, es algo que oculta pero es la razón principal de tener una piel tan suave.
•-Siendo un súcubo, tiene la enorme necesidad de satisfacer sus placeres sexuales por lo menos una vez al día.
•-Al llegar, apenas instalarse en su habitación; un portal se abrió dejando caer a una gata púrpura que, por razones curiosas se volvió su empleada particular, ya que ella le da información de cualquier cosa que necesite.
•- Ibuki Mioda - Super Dangan Ronpa 2