Party Hard (posible +18 )

No se como había pasado esto pero apenas había llegado a la fiesta que se desarrollaba excelentemente aparte de las palabras del anfitrión por el cual me habían llamado para que me presentara a remplazarlo porque al parecer teníamos gente importante de varias de las casas que se rumoreaba que habían venido los greenligth de Feuerrote, los miembros destacados de Blattgrün, los que no podían faltar de  Lauftgrau y algunos habitantes de la zona, aun así habían otros rumores que decían que estaban  los chicos de gossip press .recolectado información, es decir que no podía embarrarlas y que le paso al anfitrión anterior quien sabe de seguro se calló o se perdió.


Simplemente llegue a la enorme fiesta donde había ya personas borrachas tiradas en el piso, la música a todo volumen y algunas personas saludándome. Mire a mis alrededores sin soltar la mano de la chica que me acompañaba para que no se perdiera mientras caminaba hasta donde debía llegar a dar un discurso de mala muerte para aquellos que estaban presente, chequee mi celular mandando mensajes a algunos amigos para preguntar quienes estaban en la fiesta antes de subirme en la mesa y agarrar el micrófono.


- Probando 1….2….3 – me relaje antes de seguir – bueno sean bienvenidos a la party hard de wasserblue para celebrar la llegada de los nuevos estudiantes, soy chastiefol y seré su anfitrión por el día de hoy  – enserio abecés no pensaba, ni se  por qué tome la botella de vocka y me la empine dando un grito – DJ QUE SIGA LA FIESTA – mientras la música subía me acerque a la chica que venía con migo para preguntarle – qué opinas de la fiesta-

PD y pendejadas:

Era muy lindo de parte de Chasthiel (Le daba más flojera llamarlo por el nombre completo aunque sólo había omitido el "-fol") decir que si alguien se mteía con Iby, él no dudaría en meter las manos para protegerla; claro que no hacía mucha falta, ella sola, con la fuerza y su pequeño lado sanguinario bien podría hacerse cargo, pero le gustaba la caballerocidad y disposición de hombres como él. Le estaba empezando a gustar. — Ay, qué lindo de tu parte. — Conforme seguían avanzando, la plática iba siendo amena, no se la estaba pasando para nada mal y éso que la fiesta no empezaba aún ¡Ya se quería divertir! Pero de pronto arqueó una ceja y se miró los cuernos de la cabeza. — Oh, no son cuernos reales ¿Ves? — Se desprendió la diadema, aquello sólamente era un recuerdo de su hermano, porque el cabello que envuelve los cuernos es de él. — Y yo no soy un demonio, soy un súcubo, cariño. — Al final, le guiñó un ojo y continuó avanzando mientras se colocaba la diadema de nuevo sobre su cabeza.

De pronto se rió, pero se rió tan fuerte que terminó haciendo un sonido ronco con la nariz, de ésos que te aguantas y terminas jalando aire y roncando a la vez. — ¿Así que tú eres el que pinta de rosa los edificios? — Le metió un codazo amistoso, sutil y cariñoso en su costado. — La próxima vez, pínta el edificio norte, ahí es donde duermo yo, y no me gusta el tono rojo que tienen las fachadas. —

¡Al fin! Cuando Chastiel le dejó entrar al edificio de los azules (Se había resignado a no poder pronunciar el nombre que tenían) se sintió un poco extraña pero cuando notó que habían chicos de todas las escuelas; aquella extrañeza desapareció. Ya empezaba a oscurecerse y las luces que iluminaban daban un aspecto agradable y divertido, pese a que iba tomada de la mano de Chastiel, no se iba perdiendo ni un detalle, hasta de los ya ebrios tirados en el sofá. Qué curioso que tan temprano terminaran ya así. — Me gusta, tenía tiempo que no asistía a uuna fiesta así. — Ella no tomó directo de la botella, además el vodka no era lo suyo, prefería algo más alocado, como las famosas aguas locas que estaban sirviendo en una mesa; se acercó y tomó uno de los vasos libres. — Vaya que los azules saben hacer buenas fiestas. —

El vocka solo calentaba mi cuerpo haciendo que bebiera tragos rápidos para evitar el frió del ambiente, aunque fuera resistente al alcohol o a este tipo de situaciones, no sé cuántas fiestas habían pasado desde que llegue a este lugar o que pruebas tuve que pasar para acostumbrarme al ambiente divertido, fiestero y desordenado que mantenía  wasserblau para sus miembros, pensaría que era raro andar estudiando y llegar a todas las clases exhausto después de las fiestas ´pero este era el estilo de vida que llevábamos, era e orgullo del kraken soportar cualquier situación y seguir con los tentáculos arriba.

Seguí a la chica hasta las aguas locas mirando a muchos de forma agresiva y saludando a otros de forma amistosa, quienes entendían mi postura agresiva con los raros y desconocidos que se le acercaban a la chica, solo duraban unos segundos al notarme hasta que me le pegue a la espalda de iby  con una sonrisa para susurrarle a su orejab  –sabemos organizar fiestas, reventones y bailes por eso – tomando una pausa tomando un poco de aire para decir una simple oración -  quieres bailar, hermosa – las ventajas de tener el terreno a disposición y a los aliados cubriéndote las espaldas, algunos me hacían señas que si me metía con una chica de feuerrote terminaría muerto pero eso era lo que menos me importaba por que justo ahora sus ojos se posaban en mí.

Tenía un ligero olor al alcohol pero estaba más que consiente, no era lo suficientemente tonto para emborracharse y terminar más cansado de lo que estaba, tampoco quería formar uno de esos famosos numeritos donde necesitaban a 5 personas para detener sus locuras, debía mantener un poco el control por mi invitada, a la cual tome de la mano dándole un delicado jalón para marcar el camino hasta la pista de baile, si era obvio, se me estaba saliendo el romanticismo y sé que mis compañeros lo sabían.

Ella rió con el cosquilleo que sintió cuando Chast le susurró al oído e instintivamente se pasó una mano por la oreja removiendo algunos cabellos tras de ésta. — Lo noto; los Feuerrote son... muy aburridos, ojalá hubiése entrado aquí. — Le dio un trago a lo que quedaba de su vaso, el rico sabor de la piña saborizada y el frío de los hielos le cayeron de maravilla; al final se relamió los labios y continuó avanzando entre la multitud.

Había una que otra cara "conocida", sabía que eran de su edificio pero nunca había entablado conversación con ellos; eso pasaba por ser a veces un poco antisocial. Alzó la vista y enarcó una ceja. — ¿Bailar? ¿Sabes bailar? — Primero lo dijo en un ligero tono burlón, pero no negaba que se estaba conteniendo en mover el cuerpo para la pista de baile y fue arrastrada de un tirón por él hacia la pista; ella por la impresión sólo terminó riendo. — ¡Woh! —

Justo en ése momento la música electrónica no se hizo esperar y muchos más se unieron a la pista de baile; Ibuki sabía bailar muy bien y, no era por presumirse pero sabía mover sus caderas no sólo para tener sexo; si algo que disfrutaba era moverse de ésa manera. Se apegó al cuerpo de Chastiefol y pasó una mano por su nuca mientras comenzaba a menearse suavemente; volvió a dedicarle una mirada coqueta e instintivamente se mordió el labio inferior.